Una tarde de otoño con los primeros cumulos del año, sobre la cumbre de Gran Canaria, vista desde la Villa de Ingenio. Su aspecto era dantesco, sobre todo si nos paramos a recordar lo sucedido en agosto del 2007 cuando un pavoroso incendio destruyó unas 8000 hectareas de bosque en el centro de la isla. Por algún momento llegamos a ver la similitud con aquel suceso...
Suerte que como se suele decir...la virgen está planchando (esperemos que no se le quedara la plancha pegada a la ropa y que no caigan cenizas sobre nuestros bosques).
Con estas imágenes, iniciamos este blog de nubes.
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